04 de mayo de 2021
La aspiración de gases en la industria del plástico
La industria del plástico genera entre el 30 y el 40% del total de los gases de efecto invernadero (GEI) que existen en la atmósfera, explica el estudio #Plastívoros. La verdad sobre el ingrediente más tóxico de nuestra alimentación.
Al contrario de lo que se suele pensar, los GEI son indispensables para la vida, ya que se encargan de mantener una temperatura adecuada en la Tierra.
¿Cuál es entonces el problema? Que las industrias expulsan este tipo de gases en grandes cantidades, lo que multiplica su presencia en la atmósfera y por ende, acaba elevando la temperatura de la superficie terrestre. Esto causa daños irreparables en los ecosistemas y la biodiversidad, a la vez que hace peligrar la subsistencia de la especie humana. Este fenómeno se conoce como calentamiento global.
¿Cuáles son los gases de efecto invernadero?
- Vapor de agua (H2O): gas formado por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno que se obtiene por evaporación del agua. Es inodoro e incoloro.
- Dióxido de carbono (CO2): gas formado por un átomo de carbono y dos de oxígeno. Es incoloro. Desde la Revolución Industrial su concentración en la atmósfera no ha parado de crecer.
- Metano (CH4): está formado por un átomo de carbono y cuatro de hidrógeno. Es incoloro, inodoro e insoluble en agua. Es el gas más potente, ya que calienta la Tierra 23 veces más el dióxido de carbono.
- Óxido nitroso (N2O): formado por dos partículas de nitrógeno y una de oxígeno, es incoloro y cuenta con un olor dulce ligeramente tóxico. Tiene efecto anestésico y disociativo.
- Ozono (O3): formado por tres átomos de oxígeno. Desprende un olor fuerte y aunque normalmente es incoloro, en grandes cantidades puede obtener un tono azulado.
¿Qué gases emite la industria del plástico?
Los plásticos no solo generan gases durante su fabricación, sino también durante su reciclaje o degradación. Algunos de los gases generados a lo largo de estas tres fases son el metano, el dióxido de etileno y el dióxido de carbono.
La industria del plástico es la responsable de emitir más de 1,34 gigatones de gases al año, equivalente a lo que emitirían 295 centrales eléctricas de carbón de 500 megavatios cada una, según Plástico y clima: los costos ocultos de un planeta plástico.
El problema del metano
Los gases emitidos varían en función del tipo de plástico fabricado, pero la mayor parte de las industrias expulsan metano, un gas que atrapa el calor y calienta al planeta 86 veces más que el dióxido de carbono.
En grandes cantidades el metano es capaz de desplazar el oxígeno, provocando la asfixia de los que se encuentren en ese momento en la estancia. Otros de los síntomas que se pueden experimentar son dolor de cabeza, mareo, náuseas y vómitos. Asimismo, puede llegar a ser inflamable si se mezcla con determinadas concentraciones de aire, lo que multiplica el riesgo de incendio.
Cuidado con el óxido de etileno
El óxido de etileno está presente en la industria plástica, y aunque no es un gas de efecto invernadero, es extremadamente perjudicial para la salud.
Estar expuesto a la inhalación de etileno durante largos períodos de tiempo puede provocar irritación en ojos, piel y otras mucosas, además de problemas cerebrales y del sistema nerviosos. Los abortos espontáneos o la esterilidad son también otras de sus consecuencias. En los casos más graves respirar este gas puede provocar cáncer.
Protege a tus trabajadores con la aspiración industrial
Los trabajadores de la industria del plástico están continuamente expuestos a la inhalación de gases perjudiciales como el metano y el óxido de etileno, pero también a otros muchos que tienen los mismos efectos sobre la salud.
En estos casos, la solución pasa por instalar un sistema de aspiración industrial que capture los contaminantes antes de que entren en el aparato respiratorio del operario. Estos equipos no solo se encargan de extraer el gas, sino también de filtrarlo y devolverlo completamente limpio al ambiente.
Desde Barin ofrecemos una amplia variedad de sistemas, con el fin de adaptarnos a las necesidades de tu empresa. Así, podrás elegir entre equipos portátiles, con brazos articulados, cabinas, campanas o inyectoras que prometen bajo consumo y una alta durabilidad.
Por si todo esto fuera poco, debes recordar que con la aspiración de gases no solo estarás garantizando la salud de tus empleados, sino también colaborando con el cuidado del medio ambiente.
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